Los psicólogos son profesionales de la salud mental, que ayudan a las personas a lidiar con los pensamientos, sentimientos y comportamientos que se les presentan por diferentes situaciones. El dolor agudo y continuo afecta la vida de quien lo padece, por ello queremos analizar el papel de la psicología en el manejo del dolor crónico para ayudar a quienes sufren por esta razón.
¿Qué es el dolor crónico?
Según la American Cancer Society el dolor crónico es un tipo de dolor que puede durar meses y hasta años. Un dolor que se prolonga por más de tres meses, incluso a pesar de utilizar medicación, es considerado crónico. Es un tipo de dolor que se puede presentar en cualquier parte del cuerpo, y puede estar presente siempre o aparecer y desaparecer.
El dolor crónico puede presentarse luego de lesiones o de una cirugía, así como también puede no tener ninguno de estos antecedentes. Personas con enfermedades como diabetes, artritis, fibromialgia o intestino irritable, pueden sufrir dolor crónico mientras padecen estas enfermedades.
El impacto psicológico del dolor crónico
Esta condición puede afectar a las personas de tal modo que no pueden realizar sus actividades diarias con normalidad. Es decir, el dolor crónico interfiere en sus relaciones personales, en el trabajo y en su vida social. Además, pueden descuidarse o ser incapaces de cuidar a otros.
Estas situaciones pueden provocar falta de concentración, depresión, ansiedad, problemas para conciliar el sueño o para mantenerse dormido. Incluso cambios de apetito. Todo esto conlleva a que el dolor empeore y que el ciclo sea difícil de acabar.
La psicología y el manejo del dolor crónico
El papel de la psicología en el manejo del dolor crónico, tiene como base terapias y técnicas que pueden ayudar a pacientes que sufren de dolor crónico a mejorar su condición. Y así lograr que tengan una mejor calidad de vida, entre ellas:
Terapia cognitivo-conductual (TCC)
La terapia TCC permite que las personas cambien sus pensamientos, sentimientos y comportamientos que conducen a emociones negativas y que generan sentimientos de desesperanza, ansiedad y depresión, lo cual puede exacerbar el dolor.
Esta terapia busca que la persona aprenda a identificar patrones de negatividad y convertirlos en positivos. Para que así pueda responder y pensar de forma más saludable con respecto al dolor.
Terapia de aceptación y compromiso (ACT)
La terapia de aceptación y compromiso se enfoca en la idea de que el dolor crónico se debe a la manera en como reaccionamos a él. Si nos concentramos en tratar de evitarlo o controlarlo, se cree que el sufrimiento empeora. Por lo tanto, aceptar estos pensamientos y sentimientos de forma más abierta y compasiva, aceptando que hay cosas que están fuera de nuestro control puede ser muy útil en el manejo del dolor crónico.
Este tipo de terapia enseña a los pacientes a manejar sus pensamientos y sentimientos de dolor. También les permite identificar sus valores, para fomentar cambios positivos en su vida.
Mindfulness o atención plena
El término atención plena se refiere a una práctica que consiste en prestar atención al momento presente sin juzgar. En el caso del dolor crónico, el mindfulness permite ver el dolor desde otra perspectiva, ya que el cerebro cuando reacciona a esta sensación, inmediatamente crea un juicio negativo sobre él queriendo que desaparezca cuánto antes.
La atención plena ayuda al mirar el dolor sin hacer un juicio, mediante técnicas y prácticas que ayuden a la persona a respirar de manera más profunda, a relajarse y concentrarse en el ahora. Por ejemplo, con ejercicios de respiración o escaneo corporal visualizado, entre otros.
Psicoeducación
La psicoeducación brinda a los pacientes con dolor crónico la posibilidad de comprender mejor su condición y aprender a manejarla. Es una manera de educar a las personas para que entiendan mejor la conexión que existe entre el cuerpo y la mente. Así como de qué forma el estrés y lo que sienten puede tener impacto en el dolor, y como técnicas de manejo del dolor y autocuidado pueden ser efectivas para mejorar el dolor.
Aprender a manejar el dolor, reducir el estrés, mejorar el estado de ánimo y mejorar la calidad de vida, son algunas de las ventajas que la psicoeducación ofrece.
Estrategias para encontrar ayuda en la gestión del dolor crónico
Quienes sienten tanto dolor que su vida cotidiana se ve afectada, necesitan buscar un apoyo psicológico. Y así encontrar ayuda para transitar de una manera más sana por este difícil camino.
Habla con tu médico de cabecera
Tu médico de cabecera puede ayudar a crear un plan de tratamiento integral que incluya medicamentos, terapia física y terapia psicológica. Que estos se complementen para lograr eliminar o reducir el dolor, o llevar una vida plena aún con dolor.
Consulta a un psicólogo clínico o a un terapeuta
Un psicólogo clínico o un terapeuta son los profesionales indicados para poner en prácticas terapias como la TCC o la ACT, así como terapias de relajación o de grupo que pueden ayudar a pacientes con dolor crónico a manejar su dolor y mejorar su calidad de vida.
Consulta con psicólogos de lima Perú que pone a tu disposición especialistas calificados para gestionar el dolor crónico, así como de problemas asociados.
Grupos de apoyo
Los grupos de apoyo están compuestos por personas que están pasando por una situación igual o similar. Conocer sus experiencias permite comprender que no estás solo. Este tipo de grupos están liderados por profesionales que ofrecen sus conocimientos para ayudar a otros y su sabiduría y las vivencias de otros resultan beneficiosas en estos casos.
Servicios de salud mental online
Si el dolor impide que vayas a una consulta de forma presencial o prefieres estar cómodo en casa, de igual forma puedes recibir apoyo profesional psicológico para tratar el dolor crónico. Actualmente, existen servicios de salud mental en línea. En estos los terapeutas utilizan recursos como las videollamadas o aplicaciones para dar atención personalizada a los pacientes.
Conclusiones
Millones de personas en el mundo viven con dolor crónico. Ahora que sabes el papel de la psicología en el manejo del dolor crónico, y cómo los profesionales de la salud mental pueden enseñarte y ayudarte a sentirte mejor y a tener una mejor calidad de vida, no dudes en buscar apoyo.
Las terapias, la atención plena y la psicoeducación son mecanismos que la psicología pone a disposición de los pacientes con dolor crónico. Recuerda que tus pensamientos tienen poder, y con una guía profesional puedes obtener buenos resultados.