Los miedos más frecuentes en los niños pequeños cambian según la edad. Las preocupaciones y reacciones a las situaciones de los niños varían enormemente. En este artículo vamos a hablar sobre las diferencias entre el medio, la ansiedad y las fobias. Y sobre cuáles son los miedos más frecuentes en los niños pequeños.
¿Cuáles son las diferencias entre la ansiedad, los miedos y las fobias?
El miedo es un sentimiento que desencadena una serie de cambios en el cuerpo.
Cuando sucede que una persona tiene miedo, el cuerpo se prepara para hacer frente a la situación. Para ello, la frecuencia cardíaca y la frecuencia respiratoria se vuelven más rápidos y la persona puede ponerse pálida, sudar, tener una sensación desagradable en el estómago o sentirse inestable.
Mientras que el miedo tiene una causa en particular (por ejemplo. miedo a un perro que ladra), la ansiedad es una sensación desagradable más general, en las que puede estar claro por qué la persona está preocupada.
Una fobia es un miedo muy fuerte de algo específico. El miedo es mucho más fuerte que el riesgo de daño e interfiere con las cosas que la persona quiere hacer.
En todas las edades, es normal sentirse preocupado por algunas situaciones. Y tener miedo es la forma en que podemos estar preparados para conocer y tratar con el peligro, que es lo que hace que estemos en alerta y listos para entrar en acción.
¿Cuáles son los miedos más frecuentes en los niños pequeños?
Los niños pequeños no tienen una comprensión de tamaño, espacio y tiempo. Por eso, pueden, por ejemplo, tener miedo de irse por el inodoro con el agua, o se molesta cuando se va su mamá y/o papá porque no entienden lo que significa decir que estará de regreso a las 5 en punto.
Otros de los aspectos a pensar sobre los miedos más frecuentes en los niños pequeños, especialmente los que tienen entre 2 y 3 años de edad, es que a menudo tienen miedo y emociones muy poderosas que aún no han aprendido a controlar. Algo nuevo puede ser muy alarmante, incluso si pensamos que no hay riesgo para ellos.
Además, los niños (y la mayoría de la gente) tienen miedo de las cosas que no pueden comprender o tener bajo control, y de situaciones u objetos extraños o nuevos. Pueden tener miedo de muchas cosas, debido a que gran parte del mundo es nuevo para ellos.
Los temores también pueden ser aprendidos. A veces vienen de una experiencia directa con algo que duele, por ejemplo, ser mordido por un perro. Un miedo también puede ser enseñado por los padres, hermanos y hermanas, compañeros de juego, maestros, etc. El temor de quedarse solo en la noche o de la oscuridad todavía es común entre los niños en edad preescolar.
En ocasiones se hace necesario acudir a un centro psicológico Lima para tratar los miedos y fobias en los niños.
Entre la realidad y la imaginación
Otro factor a tener en cuenta para entender los miedos más frecuentes en los niños pequeños, es que también tienen mucha imaginación, y algunas de las cosas que se imaginan que también creen que son reales, por ejemplo: monstruos (especialmente los niños menores de tres años, que todavía no saben realmente lo que es real y lo que no es real).
Los niños más grandes a menudo se preocupan de que sus padres se puedan separar, especialmente si ven que esto les ocurre a las familias de sus amigos, o si hay una gran cantidad de discusiones familiares. A su vez, es importante indicar que la ansiedad es contagiosa y puede transmitirse fácilmente de una persona a otra. Si su papá o mamá está demasiado preocupado por muchas cosas, los niños tienden a ser más ansiosos.
Ante esas situaciones, es útil darles a los niños información acerca de sus miedos, así como responder a sus preguntas sobre cosas como las guerras, la muerte, enfermedades, etc. ya que si ellos pueden conocer ese tipo de existencias los ayuda a tener menos miedo.