Expresa Salud Emocional
Te brindamos un blog de psicología centrado en nuestra experiencia de trabajo como psicólogos.

Encontrarás temas y soluciones basados en las herramientas y conocimiento de la psicoterapia y de nuestra actividad como psicoterapeutas.
bt_bb_section_bottom_section_coverage_image

Cómo mejorar tu rendimiento en el trabajo y mejorar también como persona

agosto 6, 2019por Romina0

¿Sientes que no puedes tomar el control de tu rendimiento en el trabajo, que no sabes cómo mejorar tu reputación y cómo alcanzar nuevos niveles de habilidades? Aquí te ofrecemos algunas recomendaciones para el desarrollo profesional que también pueden ayudarte a mejorar como persona ya que implican revisar tus costumbres y tomar nuevos hábitos para sentirte mejor. Como psicólogos en Lima sabemos que estas recomendaciones son generales y que cada individuo tiene necesidades particulares. Por eso, si sientes que necesitas ayuda profesional particular, ¡ponte en contacto con nosotros!

rendimiento en el trabajo

¿Qué hacer para mejorar tu rendimiento en el trabajo?

1) Organiza y prioriza

Crea un horario diario y síguelo. Identifica las tareas más importantes o los aspectos que más atención requieren y asegúrate de que se lleven a cabo y se cumplan. Asegúrate de que su lista de tareas sea manejable, agregue valor y beneficie a tu trabajo tanto como a ti como empleado.

2) Deja de lado el multitasking

Responder una llamada telefónica, responder un correo electrónico y participar en un proyecto de forma simultánea suena a ser un trabajador eficiente pero la calidad del trabajo se ve comprometida y, así, no logras ningún rendimiento en el trabajo. La multitarea reduce o ralentiza la inteligencia emocional, aumenta los niveles de estrés y provoca errores. Trabaja en una tarea a la vez.

3) Evita las distracciones

¿Sabías que el enfoque es una cualidad fundamental de las personas productivas? Nuestros cerebros están conectados para funcionar mejor cuando nos centramos en una sola tarea. Práctica mantenerte enfocado y esforzarte por completar una tarea antes de sumergirte en otra.

4) Administrar interrupciones

Es fácil minimizar u olvidar cuántas veces nos interrumpen durante el día. Las interrupciones pueden presentarse en todas sus formas: compañeros de trabajo, jefes, familiares, etc. Este es un gran truco para gestionar sus interrupciones: puedes anotar en un papel el nombre de la persona y los temas sobre los que necesitan hablar y hacerlo todo de una vez en lugar de tres o cuatro veces al día para discutir sobre un mismo asunto.

Te puede interesar  Manejo del estrés y aprender a relajarse con facilidad

5) Sé un gran finalizador

Muchos de nosotros somos excelentes para hacer titulares, pero muchas veces no llegamos a terminar. Piensa cuántas veces has comenzado algo nuevo: un proyecto, una resolución de Año Nuevo y luego han quedado en el olvido. Retoma la lista de tareas del punto 1 y reflexiona sobre estos temas para analizar tus contribuciones y logros.

6) Establecer pequeños hitos

El camino para completar un gran proyecto puede parecer abrumador. No permitas que eso te impida tomarse el tiempo para celebrar los pequeños logros y alcanzar el rendimiento en el trabajo. Divide los proyectos grandes en bloques de mini tareas y establece métricas de éxito individuales para mantener altos tus niveles de moral y energía. Esto sirve tanto para el trabajo como para la vida privada.

7) Simplemente escucha

Escuchar es vital para una comunicación efectiva. Pasa tiempo pensando en cómo escuchas. ¿Interrumpes a los demás? Las habilidades de escucha maduras conducen a una mayor productividad con menos errores, crecimiento innovador y mayores tasas de satisfacción del cliente.

8) Busca siempre la claridad

La claridad proporciona confianza. Haga preguntas si no está 100% seguro de sus responsabilidades. Programa un período trimestral para reevaluar los objetivos firmes, cómo tus tareas cumplen esos objetivos y cómo puedes mejorar (sea con otros miembros del equipo) para alcanzar cada objetivo.

9) Identifica tus puntos ciegos

Los puntos ciegos son áreas que desconocemos acerca de nosotros mismos y pueden causar que las buenas intenciones se perciban de manera negativa. Para identificar los puntos ciegos, debes estar dispuesto a verse honestamente, a pedir comentarios a los demás y estar dispuesto a hacer cambios. Pregunta a tu familia, a tus amigos, a tus compañeros de trabajo cómo te perciben; puedes así descubrir comportamientos que obstaculizan tu progreso, así como fortalezas que desconoces. Toma esos comentarios como un punto positivo en lugar de un juicio.

Te puede interesar  Psicólogos en Lima: terapia para tratar la fobia social

10) Simplifica algo

A menudo hacemos cosas porque «esa es la forma en que siempre lo hemos hecho», incluso si es complicado o desordenado. «¿Hay una forma más efectiva de lograr los mismos resultados?». Haz una lluvia de ideas para determinar si estás trabajando de la manera más eficiente posible. Siempre cree que las cosas se pueden mejorar y que puedes mejorar el rendimiento en el trabajo.

¡Y no lo olvides! Date tiempo libre: muchas personas no quieren tomarse vacaciones por temor a perder su puesto, pero el tiempo de vacaciones es crítico para el desarrollo profesional. Sin ella, los niveles de estrés y agotamiento aumentan y la productividad disminuye.

Y recuerda también que la pasión es uno de los impulsores más importantes del éxito. Si no te gusta lo que haces, es difícil hacer tu mejor esfuerzo y rendir al máximo de tu capacidad. Asegúrate de que sus valores se reflejen y respeten en tu vida personal y profesional para que pueda ver el verdadero significado de todo lo que haces.

¿Cambio profesional?

Quizás te encuentres en un punto en el que no sabes si lo que estás haciendo es realmente lo que te gusta hacer profesionalmente. Quizás no es tu vocación. Vocación es dedicarse a alguna actividad para lo cual desarrollamos una disposición o mostramos tenerla a través del curso de nuestra vida. A pesar de lo que nos dicen, la pasión es algo que se desarrolla con el tiempo. Se descubre a través de experiencias de vida. El trabajo “soñado” tampoco es un destino exacto está en constante evolución. Desarrollar nuestro propósito requiere tiempo, paciencia, trabajo y una buena dosis de autorreflexión. La orientación vocacional incluye pruebas psicológicas y entrevistas, a través de las cuales podrás descubrir cuál actividad profesional es la más adecuada para involucrarte, este es el primer paso en el logro ansiado de encontrar tu vocación.

Te puede interesar  Emociones en Navidad y Año Nuevo: ¿sabes cómo esta temporada afecta tu mente?

Deja una respuesta

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies